Columna de análisis social, cultural, político y económico.
Mamotreto bocón y dicharachero. Escrito cum animus jocanti, es decir, nomás
jugando. Por lo mismo, mal harían mis ocho avispados lectores en darle crédito
a las sandeces del autor. Conste.
Febrero 25 de 2018 No. 242
HAY TIEMPOS PARA
LANZAR LOS COHETES Y TIEMPOS PA REJUNTAR LAS VARAS
Proverbio campesino.
Proverbio campesino.
Jalisco, mi tierra
natal, es muy rica en sabiduría popular.
Sobretodo en el Llano Largo y Quitupan, en el sur del estado.
Yo tuve la oportunidad de acompañar a Elenita en una visita a la parentela de los Barragán en 1950, fecha festiva, pues se estaba celebrando la fiesta patronal del pueblo.
Castillos toritos y muchos artilugios de fuegos artificiales. Muchos adornos de papel de china y sobre todo cohetes, muchos cohetes.
Fascinado, los veía elevarse al cielo con un fuerte silbido, para estallar luego con gran estruendo, en una lluvia de chispas de colores formando abanicos gigantescos.
Imaginen a un chiquillo de casi cinco años abriendo ojos desmesurados ante tamaño espectáculo.
Luego, sorprendido, me sumé a la parvada de mocosos contratados por los coheteros, para recoger las varas de los artefactos ya tronados.
Resulta que las varas, escogidas por ser rectas y muy valiosas, nos las pagaban a cinco centavos cada una. Yo reuní como diez.
Mi primo José otras tantas.
Como premio adicional, nos dieron un “ponteduro”, bola de palomitas con melaza de piloncillo. Magnífico.
El proverbio es fácil de entender. Hay días felices y hay días nublados.
Gratos recuerdos de mi familia materna.
Sobretodo en el Llano Largo y Quitupan, en el sur del estado.
Yo tuve la oportunidad de acompañar a Elenita en una visita a la parentela de los Barragán en 1950, fecha festiva, pues se estaba celebrando la fiesta patronal del pueblo.
Castillos toritos y muchos artilugios de fuegos artificiales. Muchos adornos de papel de china y sobre todo cohetes, muchos cohetes.
Fascinado, los veía elevarse al cielo con un fuerte silbido, para estallar luego con gran estruendo, en una lluvia de chispas de colores formando abanicos gigantescos.
Imaginen a un chiquillo de casi cinco años abriendo ojos desmesurados ante tamaño espectáculo.
Luego, sorprendido, me sumé a la parvada de mocosos contratados por los coheteros, para recoger las varas de los artefactos ya tronados.
Resulta que las varas, escogidas por ser rectas y muy valiosas, nos las pagaban a cinco centavos cada una. Yo reuní como diez.
Mi primo José otras tantas.
Como premio adicional, nos dieron un “ponteduro”, bola de palomitas con melaza de piloncillo. Magnífico.
El proverbio es fácil de entender. Hay días felices y hay días nublados.
Gratos recuerdos de mi familia materna.
A EPN PARECE QUE TODO
LE SALE AL REVÉS.
En el Campo Marte,
estando el señor Presidente, los Secretarios de la Defensa y de la Marina
Armada de México. Acompañados de los presidentes de los poderes legislativo y
judicial, se rindió honores a la Bandera en su día.
Al izar el lábaro patrio, lo hicieron al revés, es decir, de cabeza.
Sin palabras.
Juzgue por usted mismo.
Vale.
Al izar el lábaro patrio, lo hicieron al revés, es decir, de cabeza.
Sin palabras.
Juzgue por usted mismo.
Vale.
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