OBRADOR Y SUS TONTERÍAS?...

¿Qué es mejor? ¿Tener más o repartir mejor?

Estados Unidos es un país rico pero no todos sus habitantes.

Tiene el Producto Interno Bruto (valor de productos y servicios durante un año) más grande del mundo (20,513,000 millones de dólares, según el Fondo Monetario internacional). Pero, al dividir esa riqueza entre su población, su ingreso per cápita ocupa el lugar diez del orbe: 62,152 dólares por habitante.

Sin embargo, en Índice de Calidad de Vida (creado por Economist Intelligence Unit) que mide, entre otros factores: salud, vida familiar, vida comunitaria, bienestar material o seguridad de empleo, Estados Unidos ocupa el lugar 32 en el mundo (6,720 puntos).

Otro ejemplo:

Noruega es la economía número 28, por su Producto Interno Bruto: 441,439 millones de dólares. La repartición de esa riqueza es de 74,065 dólares por noruego (lugar 6 del mundo).

En el Índice de Calidad de Vida, empero, ocupa el segundo lugar mundial (8,051 puntos), solo por abajo de Suiza.

Esto es, sin ser un país tan rico, tiene a su población con un altísimo nivel de calidad de vida.

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¿Cuál es la fórmula mágica para tener un mejor Índice de Calidad de Vida? Una distribución más equitativa de la riqueza (el Producto Interno Bruto). Pero también un Estado preocupado por mantener servicios y atención de alto nivel entre su población.

Estados Unidos puede tener la mayor riqueza del mundo, pero es un hecho que la mayoría de los norteamericanos nunca podrán tener un depa frente a Central Park o hacer sus compras en Beverly Hills o poseer un Ferrari rojo a la puerta (ese mundo plástico que vende Hollywood con su falso american way of live). En cambio, la situación económica, de educación y de salud para muchos de sus habitantes es precaria.

Por otro lado, Noruega es un país que distribuye mejor su riqueza nacional, que garantiza los servicios públicos de salud y educación, que transparenta mejor los ingresos de cada noruego y que no permite que haya una gran distancia entre el que menos gana y el que más.

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Veamos.

México es la economía número 15, por su Producto Interno Bruto (1,199,264 millones de dólares).

Sin embargo, al dividir esa riqueza entre el número de habitantes, ocupa el lugar 63 (20,616 dólares por mexicano, en teoría).

En Índice de Calidad de Vida, el país ocupa el lugar 46 (6,309 puntos).

Mexico tiene un buen Producto Interno Bruto pero una enorme población que diluye esa riqueza. Es la economía 15 del mundo pero por su ingreso per cápita ocupa el lugar 63 del mundo.

¿Por eso su Índice de Calidad de Vida es bajo?
¿Nunca podrán los mexicanos vivir mejor?

No necesariamente.

El caso chileno.

Chile es la economía número 41, por su Producto Interno Bruto (299,887 millones de dólares). Distribuyendo esa riqueza entre sus habitantes, arroja un ingreso per cápita de 25,667 dólares por habitante, lugar 57 del mundo.

Aquí, la diferencia notable:

En Índice de Calidad de Vida, Chile ocupa el lugar número 20 del mundo, el segundo lugar del continente americano, solo por abajo de Canadá (lugar 11 del mundo, con 7,599 puntos).

Chile califica con 7,097 puntos (por arriba de Estados Unidos, 6,720 puntos, lugar 32, y de México, 6,309 puntos, lugar 46).

¿Por qué los chilenos tienen mejor Índice de Calidad de Vida que los mexicanos si son la economía 41, México es la 15?

¿Por qué es mejor que Estados Unidos si el ingreso per cápita de uno y otro son notablemente diferentes: 62,152 dólares por norteamericano contra 25,667 dólares por chileno?

Desde luego que Chile tiene problemas por resolver, que hay población pobre y tensiones políticas.

Chile y México fueron laboratorios del Neoliberalismo. Sin embargo, hay un índice que los diferencia y marca de manera considerable: Chile ocupa el lugar 27 en el índice de percepción de la corrupción, Mexico: el 138. (Por cierto, Noruega ocupa el lugar 7 y Estados Unidos el 22)

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Por momentos pareciera que el presidente lic. Andrés Manuel López Obrador está más interesado en mejorar el Índice de Calidad de Vida de los sectores olvidados del neoliberalismo que en hacer crecer la economía ¿Eso es malo? Desde luego, no (ahí está Noruega).

También atacar la corrupción. ¿Eso es malo? Desde luego, no (ahí está Chile).

Los indicadores que pronostican el crecimiento económico del país van a la baja. Pero el país tiene vínculos económico empresariales que hacen imposible su caída (A pesar de Donald Trump). En realidad si hay un plan de inversión pública que incentivará el crecimiento económico (El tren Maya, el cruce transísmico, la refinería Dos Bocas, la reactivación del resto de refinerías, el nuevo aeropuerto en Santa Lucía, terminar las obras inconclusas de las administraciones anteriores, etc.) del país.

Son 5 meses aún. Imposible sacar al país tan rápido.

México tiene que superar a Chile y acercarse más a Noruega.

Repartir mejor el pastel, esa es la consigna obradorista. Es posible.

Don Diego de la Vega.

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